domingo, 10 de diciembre de 2017

Derechos Humanos, # 239

Hoy vemos con naturalidad el tema de los derechos humanos (DH),  pero no fue sino hasta el 10 de diciembre de 1947 que las Naciones Unidas hicieron la Declaración  Universal de los Derechos Humanos, no obstante, no todos los países firmaron por una u otra razón, entre otras razones por la inclusión del derecho a fundar una familia, el derecho a la propiedad privada y el derecho a  profesar su propia religión o credo.

La universalidad  es porque son derechos inalienables, propios de todo ser humano, en su propio valor y reconocidos por las naciones en general.

En 1966 se firma en la ONU el Pacto Internacional de Derechos económicos, sociales y culturales firmado por 65 estados en su momento ; y el de los Derechos Civiles y Políticos firmado por 64 estados por igual. Se hace una división en dos.

En 1984 en San Marino, la Unesco reconoce que hay derechos individuales como colectivos, propio de los pueblos  y  su desarrollo. La pluralidad cultural es tenida en cuenta.

En 1993 en Viena se reconoce la importancia de las particularidades nacionales, regionales y de los patrimonios culturales, históricos y religiosos sin olvidar la visión universal de los DH.  La globalización va haciéndonos cambar nuestras percepciones y aceptación de las diferencias culturales

El cristianismo  inicial a través de la prédica de los Padres de la Iglesia con la visión de que somos hechos a imagen y semejanza de Dios ; y el Islam que  plantea su igualdad basado en su origen único y destino común, ambos  nos dan una base para la visión de igualdad.  No obstante se considera que todo este pensar en las libertades  personales comienza con el cilindro de Ciro en Persia en el 559 al 529 AC que promulgaba que la libertad de culto en los territorios  conquistados y la abolición de la esclavitud.

En 1463 al 1494 Dicodella Mirandola plantea en el Renacimiento  sobre la Dignidad humana basado en la autodeterminación para crear su propio destino. Ya en nuestro presente los D H, se ve como   fruto primero  de la “Carta de los Derechos Humanos” o enmiendas  a la Constitución de  USA, y en segundo  al fruto de la Revolución Francesa y su resolución de los “Derechos del Hombre y del Ciudadano”. Una visión muy occidental sobre el tema, opinan muchos, catalogada de etnocéntrica y con  deseo de asimilar a los otros no occidentales dentro de su concepción. Achacan a la globalización en el mismo sentido de intentar una imposición cultural donde se olvida uno de sus tradiciones.

En América, Haití, primera nación independiente en 1804,  después de USA en el  1776;   en su Constitución de 1816 habla de libertad, igualdad ante la ley, derecho de propiedad, deberes del ciudadano, la separación de los poderes del estado y otros, propio de la Declaración de los DH en Francia de 1789.  En 1821 en el Acta Constitutiva de Independencia y creando el Haití Español, Núñez de Cáceres se basará en lo anterior y copiará algunos artículos de la Constitución Haitiana. En 1844 la nueva nación copia en la ciudad de San Cristobal más de 100  artículos de la Constitución Haitiana de 1843 basado en  los DH francés. Luego  México en la Constitución de 1917 nos habla de los derechos del hombre al trabajo, a mejores condiciones de vida, al bienestar social; estos son derechos económicos, sociales y culturales.

La Declaración cuando se enfrenta a la diversidad cultural dentro de una misma nación, donde se ha de respetar la individualidad, sin dejar de tener presente la comunidad a la cual el individuo pertenece con sus creencias y costumbres, las cosas se complican.

La multiculturalidad donde cada grupo similar se aísla dentro de una misma sociedad no es igual a cuando estos individuos se hacen parte real y activa dentro de la sociedad donde conviven y actúan de forma intercultural, el dialogo, el participar el uno con el otro dejando cada quien su visión del mundo dentro de un marco total de respeto y aceptación.

La declaración es universal, pero su adaptación a la realidad, a su concretización, aplicación se hace individual o particular de ahí el peligro de desconocer los aspectos culturales de una comunidad, los aspectos ancestrales de ese individuo, sin caer en discriminación, estereotipos o peor aún, en generalización despectiva o en un * “yerrar “a los mismos.

Dentro de una misma nación hay diversidad de culturas por edad, género, sexualidad, religión, deportes, educación, grupo social, partidista, ideologías y todos forman un colectivo más o menos homogéneo dentro de una cultura mayor que los arropa a todos.

Hablar de Derechos Humanos sin tener presente los aspectos  culturales propios de la región, zona y la familia misma es tratar de vaciar el mar en un pequeño hoyo en la playa.

Hablar de un Ciudadano Global sin tener presente a los Derechos Humanos y a la persona humana , valga la redundancia;  con su dignidad propia,  es seguir llenando  el hoyo de la playa con un cubito y tratar de llenarlo con  todo el agua del mismo  mar.




*. La yerra es el acto que consiste en la marcación del ganado utilizando un hierro caliente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario