lunes, 11 de marzo de 2013

A propósito del nuevo Papa Católico Romano.


Nací católico por parte de madre y mis tías yucatecas. Crecí ajeno a todo elemento religioso excepto la figura de la Guadalupe. Ya en la pre adolescencia, como fruto de la acción-reacción;  la revolución me lanzó a la iglesia de forma militante, como catequista, miembro de la Juventud Acción Católica y ya fuera de la isla en la  Juventud Estudiantil Católica, las Congregaciones Marianas  Llega el Concilio Vaticano II con su revolución interna para luego "Manresa Loyola" abrirme sus brazos.  Cinco años más tarde, después de beber en el seno  de la misma iglesia salí como un laico común y corriente para trabajar como educador en los dos colegios católicos  más importantes de la época en la ciudad corazón: La Salle y el Sagrado Corazón y en  su única universidad católica en aquel entonces, la UCMM

En la universidad di clases,  y aun me ufano, me enorgullece sin humildad alguna, el haber sido el único no clérigo que impartía Doctrina Social del la Iglesia en sus aulas .  Además de esa asignatura daba Ética Profesional y la Introducción a la Filosofía, asignaturas propias de los clérigos por igual, pero no de exclusividad como era el caso de la Doctrina Social.

Otro orgullo fue el haber dado en Semana Santa un retiro espiritual a todas las monjas mercedarias del país en el mismo colegio Sagrado Corazón. Usamos el Documento del Concilio Vaticano II para esos fines, duró los tres días.

Luego en el tiempo, cosas de la vida,  me  case por segunda vez, me recasé,  y ahí mismo la iglesia me dijo adiós. Desde entonces  me llamo a mi mismo católico libre, católico de formación y libre porque no soy de religión o iglesia alguna. Cuando el papa ultimo llegó pensé que me iba a dejar entrar, y lo que hizo fue reafirmar mi no entrada. Hoy realmente ya no me interesa volver, pero me gustaría que el nuevo papa me dejase la puerta abierta, por si acaso. He dedicado mi vida a ser un sacerdote sin sotana, y ahora célibe…pues que más querrán?

Solo pediría al Espíritu Santo, y es un gran atrevimiento de mi parte el hacerlo, de que el nuevo papa sea:     No engreído ni con aire de ser superior a otros y reconozca la necesidad de ser espiritual, tenga un corazón abierto, humilde;
- que tenga deseos de que haya igualdad y justicia para todos; 
 -tenga empatía con los problemas del mundo y se compadezca de ellos y lo lleve a actuar, no solo a hablar desde un balcón sin casi mover los labios como si no sintiese lo que dice;
- que su corazón este limpio y pueda ver las necesidades de los que le rodeamos;
 -que busque la paz ay la armonía en su vida y en la misma  iglesia que dirige dejando a un lado todo lo que no da paz y esté de más y por tanto no produce la armonía necesaria; 
 -que  sepa oír las voces disidentes, quite de su alrededor  todo anillo  que le impida oír y  pueda decir como El Quijote, avanzamos pues los perros  nos ladran. 

 En el fondo que sea ejemplo desde su ropa diaria,y  su andar y por tanto  la parafernalia actual fuese eliminada; 
-sea humilde, luzca humilde y actúe con humildad creando así empatía y simpatía con la humanidad; 
 -que sea humano, uno más del montón de los mortales sin dejar de ser cabeza y corazón de su comunidad.

Espero no haber pedido mucho y  si el Espíritu Santo anda por ahí cerca, pues se lo susurre al oído de todos los votantes.  Ah, se me olvidaba, que sea de más de 50 y de menos de 65 años, ya con  los hermanos Castro,Fidel y  Raúl;  El Rey Juan Carlos, la Reina Elizabeth, Berlusconi, López Rodríguez está más que bien.


1 comentario:

  1. Parece que el Espiritu Santo andaba por ahi y le susurro algunas de tus peticiones al Papa, pues ha inciado su papado con aires completamente nuevos, diferentes, de mucha humildad; esperemos que asi se mantenga.

    Pero como todo no es perfecto en el mundo de los humanos, no es joven como lo pretendias... :-P

    Estuvo muyyyy bueno este articulo!

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