Según se cuenta en el Génesis, Dios le dijo a Abraham que de
su descendencia nacería el pueblo de Dios. De Isaac y así fue. De él vino Jacob y luego Judá. David descendiente de
Judá y José, esposo de María era descendiente de David. Jesús hijo de José.
María virgen queda encinta y se le pone
de nombre Emmanuel tal como el profeta Isaías
había escrito. El Hijo de David.
Se da el censo y la pareja va a Belén
donde nace Jesús cumpliéndose lo que Miqueas
había dicho. Y tienen que ir a Egipto para que así se cumpliese lo que Oseas había escrito. Esto provocó que
Herodes terminase con los recién nacidos como había dicho Jeremías.
José va a Galilea, al pueblo de Nazareth que según Mateo se cumplía lo que los profetas
habían dicho de que el Salvador sería llamado Nazareno.
Juan el Bautista va a ser gestado casi
como un milagro de la naturaleza y el ángel le dice a Zacarías lo que sucedería, y así fue, naciendo el llamado Bautista más tarde como primo de Jesús.
Años más tarde, quizás 30, aparece
Juan el Bautista predicando tal como
Isaías había predicho, al igual que Malaquías. Juan bautiza a Jesús
Jesús dice a sus discípulos donde encontrarían un burro para él entrar sobre el mismo a Jerusalén tal
como Zacarías había dicho, así como
predijo que matarían al pastor y las ovejas se dispersarían.
El mismo Jesús dijo lo que iba a pasar: ser entregado a los jefes de los sacerdotes, lo condenarían a muerte, lo entregarían a los
romanos, se burlarían, escupirían y lo golpearían y matarían, pero tres días
después resucitaría.
Jesús dijo que uno de los discípulos lo
entregaría.
Jesús les dijo que encontrarían un hombre
con un cántaro que les enseñaría donde pasar la Pascua esa última noche y así fue.
Jesús le dijo a Pedro que lo negaría tres veces
antes del canto del gallo y Pedro lo negó tres veces.
Las ropas que Jesús llevaba fue dividida entre los soldados ,
él fue golpeado, se le dio vino agrio
todo tal como el salmista lo había predicho.
Todo sucedió como estaba previsto por la Escritura, todo estaba " previsto".
Si eso sucedió con Jesús, ¿quién nos dice
que con cada uno de nosotros no puede
ser parecido?
Que todo esté previsto, todo sea del fatum, la fatalidad, el destino.
Claro,
siempre queda el argumento del “ libre albedrío”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario