El silencio es
dejar de decir, el no comunicar, el no hablar, la ausencia de sonido. No
estamos acostumbrados al silencio, necesitamos el radio, la televisión encendida, el
silencio no es parte de nuestra cultura actual. Desde que llegamos a la casa
prendemos el radio o el televisor, o cualquier otra forma de emisor musical. Necesitamos
sentir que alguien nos acompaña mientras conducimos el auto, mientras esperamos,
nos ponemos los audífonos y nos aislamos. Ponemos sonido rompe tímpanos en el
auto no importa que todos sufran tu ruido.
Contra mas alto y vibrante, mejor.
En cambio,
el silencio es la fuente de
inspiración, es la fuente de la creatividad y quizás el único camino de saber
que hacer, en un momento dado, escuchar nuestro
interior, escuchar la conciencia, escuchar el consejo de los que nos
acompañan paralelamente en este viaje, escuchar los adentros de uno.
El silencio no existe, a no ser que
callemos a nuestro propio yo hablando y hablando lo que si y lo que no,
discutiendo conmigo mismo. El silencio
es una forma de entender el yo, el nos, el todo, el silencio nos da fuerzas,
nos da esperanza, nos da energía que quizás de otra forma no somos capaces de
entender y de tener.
El silencio que invade todo, no es soportado o aguantado hoy día, asusta; en cambio el silencio antes era la forma más
fácil de comunicar dos seres que se amaban; se comunicaban en el murmullo, en la respiración, en el sentir del corazón, en una simple mirada.
El silencio es la forma de escuchar lo que
se desea que uno haga en el diario vivir. Es trasladar tu mente a ese espacio
sin ruido que permita el que puedas captar el mensaje con facilidad y sin
ambigüedad, con certeza de que ese es el mensaje. Debes saber que símbolos o
signos están usando para mandarte el mensaje, de ahí el estar atento para
sintonizar el canal adecuado, el canal correcto para poder recibir y si es posible el preguntar en búsqueda de una respuesta acorde
a la vivencia o circunstancia del momento.
Hay un sonido en el silencio que debemos
aprender a escuchar. Hay un sonido en el silencio del mar que debemos aprender
a escuchar. Hay un sonido en el silencio de la naturaleza en su amanecer o
atardecer que debemos aprender a escuchar. Hay un sonido en la naturaleza
detrás de los cantos de las aves, de los grillos, de los gallos, del aire mismo
al mover las ramas que debemos aprender a escuchar.
El silencio es saber escuchar lo que hay que
escuchar, eliminando todo ruido innecesario que amordaza la palabra dicha por el
silencio.
Estas en lo cierto. Debieramos aprender a estar mas en silencio....
ResponderEliminarhola,me gustaria contactar con Jorge Ruiz, alguien sabe de un email para poder escribirte?? no encuentro ninguna informacion para poder contactar con el autor de este blog
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