sábado, 15 de noviembre de 2014

Hay momentos.

Hay momentos en este caminar que uno desea no seguir caminando, detenerse, sentarse y ya;  hay otros en que aunque sea arrastrándose, se sigue; uno entiende que debe sacar de donde  parece no existir más fuerzas, el deber, la responsabilidad, la crianza, la educación, el bagaje te levanta cual bastón y hasta te sorprendes gritando a solas de dolor, un dolor existencial, visceral.

Siempre en el fondo de nuestro peregrinar la gran pregunta, ¿vale la pena todo lo que uno intenta hacer con sus posibilidades limitadas, muy finitas, extremadamente finitas?, y se ve uno  las manos no callosas, pero si arrugadas y sigue la pregunta dando vueltas, no se calla el gusanillo: ¿por una mejor sociedad anónima, pues es en abstracto?, ¿por un mejor futuro que ciertamente no veré?

Todo se hace más difícil al ir teniendo contacto con esa realidad circundante,  una sociedad cambiante que te choca y pega  como aire seco del desierto en el mismo rostro; cierras los ojos por instinto, y te encuentras  ahí  ante ti la pobreza, humana y pobreza del bolsillo, ahí esta en escalada la inseguridad física y espiritual;  ahí esta el mundo pragmático material y el tuyo chocando con todo tu ser,  por tu formación idealista e ingenua.

De pronto te topas y conoces gente como tu, no uno o dos, sino muchos, a lo largo del país, del planeta, en zonas  y regiones diversas, en situaciones distintas, pero  todos arando en arena, todos arrojando la palabra a diestra y siniestra, todos, solo  como coraza, el pecho y con una sola arma: las ganas de pensar que la humanidad es buena y vale la pena hacer algo por ella, no en nombre de un Dios o una divinidad, sino por ella misma, porque ella merece tu sacrificio.

En medio del dolor de tu espalda, en medio de tu lento percibir y percatarte  de que las fuerzas físicas aminoran con el tiempo, y a  tus rodillas  les cuesta levantarte; ellos con su sudor, con su existir diario solo  saben decir: no estas solos, somos muchos anónimos, y aunque no lo veamos, aunque no seremos testigos del mañana, si hay que seguir, si hay que seguir  serpenteando la tierra, seguir creando canales de riego, seguir arando con las uñas, pero seguir, solo eso,  seguir hasta que ya el cuerpo te diga adiós, o más bien sea el cuerpo el que te diga:” vete,  que ya no puedo más contigo, adiós” y entonces, en ese entonces digamos adiós, hasta la próxima y adiós, dejando atrás estelas en la mar

jueves, 6 de noviembre de 2014

Dama, una dama.

Hablaba la otra noche con unos amigos y salió a relucir el término "Dama", qué concepto se esconde detrás de estas cuatro letras. En inglés se traduce por “Lady” que suele ser parte de un “prefijo” antes del nombre en Inglaterra para determinar que tal persona del sexo femenino  es de la realeza, es parte de la realeza por herencia o por decreto real. En francés Dame que por uso pasa a ser Madame (mi dama),  no tiene la importancia real como entre los británicos y pienso que no tiene el mismo trasfondo conceptual que en el castellano, Dama.

Es más fácil mencionar un nombre y decir fulana  es una dama, que el dar una descripción de dicho titulo. Por ejemplo, Madonna, JLO, no merecerían ese atributo. Angelina Jolie a pesar de su altura, esbeltez y ser embajadora de la ONU tampoco. En cambio, una Carolina Herrera…

No es un asunto de tamaño, figura física, color de ojos o tez, es cuestión de  presencia. Esa presencia que hace que todos bajemos la voz, esa actitud al caminar y al andar que uno piensa que es sobre nubes que anda, ese ademán de su cabeza altiva sin generar sensación de altivez,  esa elegancia, no importa lo que tenga puesto, aunque sea solo una cinta en el cabello y más nada. Es un don genético y educado, criado, cultivado.

Ese don de mando dentro de una muralla de humildad y atracción energética o espiritual. Es el susurro echo mandato, es la mirada sonsacadora y rastreadora de tu ser sin que percibas sus ojos en ti; es como estar entre un grupo no siendo del grupo, pero sin dejar de serlo.

No hay voz alterada, no hay ademán fuera de lugar sin ensayo alguno, no hay gesto que indique  alteración del ánimo, pero sabemos sin saber cómo, por telepatía trasmitida por ella, de que algo no gustó y la alteró íntimamente, mas sin embargo, uno recibe las ondas de que ha habido una alteración, solo ondas, ningún movimiento o gesto.

En ella no hay señal de doblez, ni de estar preparada a ceder ni un paso atrás, solo si la diplomacia del momento lo exige, para  luego ella dar dos pasos hacia delante ganando terreno, no solo el “perdido” momentáneamente,   sin uno haberse  percatado de su estrategia hasta que ya es tarde para cualquier reacción. Todo es manejado con guantes de seda.

La dama es toda una mujer en el sentido de la palabra, mas sin embargo, su compañero de vida puede verse empequeñecido ante su presencia y hasta pensemos en nuestros adentros que muchas decisiones tomadas por él, fue ella quien se las susurró en la alcoba, nunca en público. Y somos tan atrevidos en nuestro pensar que llegamos a suponer que si él evitó un desastre cualquiera que fuese, en definitiva se debió a que en la alcoba, ella le hizo ver el camino a tomar.

Una dama es independiente, autónoma, es ella misma, no importa donde esté o con quien esté. Tiene luz propia, tanta, que en ocasiones otros son vistos gracias a su luz. 

viernes, 3 de octubre de 2014

Pura vagancia o vagancia pura.

Este blog se compone de  distintos comentarios que publique en mi "status" de Facbook durante el mes de septuembre del 2014, por eso digo que es pura vagancia de mi parte


Nosotros como pueblo somos dominicanos, pero antes de llegar a esta posición fuimos Haitianos, fuimos Ingleses, fuimos Franceses, fuimos Españoles. Si a eso añadimos las raíces Tainas, Caribes, y  la de los diversos pueblos del África Occidental de donde salieron traídos a la fuerza como esclavos un sin número de seres de tribus diversas y de regiones distantes, una de otra. Si además  añadimos la de los distintos pueblos que nos han habitado con sus emigraciones permanentes como la China, Japonesa, Libanesa, Judía, Jamaiquina, Americana, Belga, Cubana, Colombiana, Portorriqueña, Rusa, Italiana,… Somos una gran mezcla intercultural como pueblo y con un padre ideológico, JP Duarte, criollo de nacimiento, de padre español, y de evidente formación europea. No somos puros, somos una mezcla de culturas y de razas que interactúan en nuestros genes. El producto final, en el hoy, es el del ser  que interactúa y piensa como un todo, diferente a cualquier otro ser de la faz de la tierra,  como el dominicano que somos.  9/20

 En mis años en la Madre y Maestra en Santiago, confeccione un trabajo sobre la ideología de Ulises Francisco Espaillat que luego fue publicado en la revista universitaria EME-EME. Suelo  comparar a Juan Bosch con UFE, por lo de ser liberal en relación a sus congeneres, por su corta estadía en la Presidencia, siete mesinos los dos, y en el fondo porque ambos tenían buenas ideas, de avanzada, pero la praxis… Lei y aprendí que UFE desde la presidencia de la nación trato de desterrar el sancocho y el merengue. No cabe duda que si algo nosotros entendemos  nos retrata como pueblo  es el sancocho donde hervimos y salcochamos lo que aparezca, aunque este plato  lo aprendiéramos de los emigrantes  provenientes de las Islas Canarias o de los mismos africanos traídos a disgusto. También el merengue, nuestro baile nacional, no la salsa cubana-portorriqueña, forma parte de nuestra identidad, la cual nace en tierra adentro, en una época aun no conocida, posiblemente inspirado en la UPA Habanera, para luego el Cibao ponerse  a bailar con el paso  semi cojeado de lado al  sonar de la tambora africana, el cuatro y/o  la guitarra española, el acordeón del norte europeo, y la guira autóctona.  Mezcla de culturas formando una sola, así somos.

“Los abuelos que han tenido la bendición de ver a los hijos de sus hijos tienen una importante encomienda: transmitir la experiencia de la vida, la historia de la familia, de una comunidad, de un pueblo, compartirla con simpleza, sabiduría y fe, en sí misma la herencia más preciada”, agregó el papa.Francisco.
Esa es una de las funciones de mi blog, no solo a los nietos e hijos carnales, sino a los "hijos" que la vida me ha dado. Compartir, transmitir antes de que se me olviden.  9/28


Según la JCE las mujeres son mayoría a la hora de votar, un 50.83% de los cedulados son del gėnero femenino y un 49.17%  conforman los  hombres.
Los mayores de 50 años  echarȧn un pulso con los más jóvenes entre 16 y 29 años. Los adultos son un 31.30% vs. 27.95% de los menores. Los entre 30 y 39 el 21.53% y los restantes 19.22% son los de 40 a 49 años de edad. La curva luce bastante normal en esta parte del dato.
Lo que no se dice lo podrían aportar los datos del censo; suponiendo que somos 10 millones (m) de habitantes, y si cerca de  7 millones son los  cedulados, los menores de edad andarȧn por los 3 millones; eso significa que 7m  posibles productores económicos mantienen a  3m y la necesidad de fuentes de trabajo en el futuro es apremiante, pues por ahí vienen 6m de brazos con brios y unas bocas posiblemente con mas brios aún.

La JCE con su disposición  referente a los símbolos de partidos impide que de hora en adelante cuando alguien estė haciendo algo bien, positivo yo le levante el dedo pulgar. Y por este medio solicito que no  me manden como respuestas mȧs pulgares arriba a mis  mensajes de Facebook, ni en los de whatsapp. Yo soy apartidista y muy político = persona muy preocupada por su polis, su ciudad, su sociedad, su región, su nación, su continente, su planeta. Pero apartidista.

Cuando veo algo y no sė, pregunto. Si quiero aprender tengo y debo preguntar sobre lo que no sė, y si no hay respuesta, la busco, la investigo, la leo; no me quedo con la pregunta flotando. Cuando vi a los Amets (policías de trȧnsito), en las esquinas con sus guantes blancos y este calor, comentė el hecho y cuestionė la razón. La respuesta era simple y hasta lógica: es para que vean las manos del agente dando el paso o deteniendo a los choferes de los vehículos y motores. (¿Los motores son vehículos?) (¿Hice una redundancia?)

No me había puesto a pensar del ser humano como un vector de microbios y bacterias donde quiera que uno vaya, dejándolos caer, esparciéndolos. Me imagino de pronto yo regando “pajaritos” en el cine, en la cafeteria, en el super, en el ascensor, en el hotel, en el concho, en el bus…y siendo intercambiados por otros “pajaritos” que otros humanos han ido dejando a su paso y se van entremezclando con los míos; de pronto veo como están los “pajaritos” mios, los  tuyos, los  de ellos, los nuestros y de pronto me han dado deseos de quedarme en el cuarto sin salir ni a la sala;  yo que ando con mi mochila a cuestas, de aquí para allȧ, y de allȧ para mȧs acá. Mi mochila debe ser un colaborador en este proceso de transportar “pajaritos”, bueno, comprare un spray antibacteriano para mi pobre mochila ya cansada de tanto andar.

En el sur del planeta se celebra la llagada de la primavera, el reinicio de la vida, de la reproducción, el brotar de las flores y con ella las mariposas y abejas volando sobre las mismas, el renacer del amor, de la esperanza. En el norte se celebra el inicio de la adultez, nuestros árboles mudaran sus hojas, y bien al norte las hojas de los árboles se rediseñaran  con grandes pinceladas de colores que competirán con las flores en colorido y majestuosidad. Cambios en nuestro clima que nos avisan que nada es estático, todo fluye, todo se mueve, todo se transforma. Cambios distintos en el norte y en el sur recordándonos que siempre hay otra cara de la moneda, todo depende desde tu óptica, desde tu habitat natural, nada es absoluto,  es relativo, depende del “yo y mis circunstancias” y que “cada uno de nosotros tiene sus propias cadaunadas”.  9/21


1964-2014, 50 años, 5 décadas, medio siglo. Ese es el tiempo que ha transcurrido desde que lleguė junto a un grupo algo grande, en mi caso  desde Chicago vía Miami,  a Punta Caucedo rumbo al kilómetro  12 y medio de la Carretera Sánchez, en Haina, a ser parte de la fundación del Noviciado Jesuítico en Manresa Loyola. Hoy 7 de septiembre;  ciertamente no fue ayer.



 Nota: comentarios en Facebook en el mes pasado, septiembre 2014.

sábado, 27 de septiembre de 2014

Otra ...que Dios nos perdone.

En mi ayer era normal el pensar convencidos total y absolutamente  de “que morir por la patria es vivir”.* Claro está, teníamos concepto de Patria, amábamos y amamos la Patria y al menos para mi familia era como respirar el pensar en la lucha por  la justicia, la dignidad del hombre, la igualdad entre todos y nos ufanábamos de que la Constitución de 1940 en la isla era la más avanzada de toda America Latina, la más liberal,  democrática y pensando en el pueblo, en las mayorías.

De más está decir   que soñábamos en un  gobierno “del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”,  era como algo que parecía llevábamos en la frente escrita.

A veces cuando escribo del ayer generalizo, pero en el fondo escribo de lo que viví, sentí, me enseñaron mis dos padres, uno más que el otro en lo patriótico y el otro en lo humano religioso. Ustedes entendieron quien era la madre y quien era el padre en ese asunto, no hay que especificar tanto.

Como ya he expresado en otros momentos, vivíamos con los cuentos de mi padre y su participación en el movimiento revolucionario del ABC contra el presidente Machado, de sus historias de los grupos estudiantiles universitarios a los cuales él no pertenecía. Del suicidio de Chibas; y por tanto  cuando llegó el proceso revolucionario contra Fulgencio Batista, pues ahí andábamos, sin mucha propaganda.

Si a eso añadimos que la historia de la isla conlleva tres guerras, una de 10 largos años, otra llamada Chiquita de trece meses con su grito de “independencia o muerte”  con Calixto García a la cabeza,  (de ahí el escrito famoso del “Mensaje a García”); y la última de las guerras  del 1895 al 98 liderada por José Marti, Antonio Maceo y Máximo Gómez, era como vivir en guerra constante. Esta última guerra contra el Imperio Español fue hurtada por los Estados Unidos por su deseo expansionista de la época y eliminó de un fuetazo la flota Española en el Oriente de la isla y con ella la presencia hispana  en el mundo internacional.

Ante lo anterior, no era muy fácil de que se nos enseñara en la escuela de que los del norte no eran realmente nuestros amigos;  yo mas bien diría que queríamos más a los “gallegos” contra quienes se luchó que a los americanos quienes fueron intrusos y mentirosos. Si añadimos que Marti nos hablaba de ese pulpo donde el había vivido,  dentro de sus entrañas,  y por tanto él mismo sabia de lo que era capaz, pues cuando sacaron las uñas, como que se venia venir, ya lo esperábamos.   Veíamos al norte con temor unido a una dependencia económica, política, y por tanto social;  ese mismo norte quien nos quitó Guantánamo al devolvernos  la isla en el 1902, ya que por cuatro años estuvieron como interventores.  Se quedaron al final con la base naval,  con   Puerto Rico,  la isla Guam y Las Filipinas. Nos pusieron a Tomás Estrada Palma como primer presidente criollo.

Uno estudio con detalles la revolución mexicana, y los héroes evidentes  eran Pancho Villa, Emiliano Zapata y luego más tarde la revolución sin sangre de Lázaro Cárdenas. Esos eran nuestros ejemplos históricos. Mi familia mexicana ayudó a su rápida asimilación por mi memoria.

La guerra civil española también nos tocó, hubo brigadas cubanas que fueron a luchar por la república, y es que en el fondo la guerra de uno era guerra de todos;  Máximo Gómez como bien saben no era cubano, nuestra bandera es creación de un venezolano radicado en Nueva York,  Narciso López, quien la llevó en una invasión fracasada. La primera bandera de nuestro Padre de la Patria, Carlos Manuel de Céspedes se parece a la de Chile. En aquel entonces había un enemigo común, el o un  imperio europeo.

También supimos de las brigadas que iban a Rusia a luchar por la revolución bolchevique, de todas partes los miembros de las brigadas internacionalistas fueron a morir por un ideal. Una idea de Patria, una idea de revolución, en fin,  ideales. No hay que ir más lejos, todos conocen al Che cubano, pero no, no era cubano.  En las invasiones contra Trujillo cubanos, venezolanos y dominicanos se juntaban en una sola unidad, la libertad dominicana.

Uno vivió esa época de armas y creció con las armas en su mente.

Todo lo anterior es porque me choca grandemente el que europeos vayan a pelear por un Estado Islámico, las fuerzas del EI son de todas partes, y eso me recuerda las brigadas rojas internacionales.

Antes se tomaba  un arma  por otro tipo de motivaciones, no eran religiosos. Las guerras   religiosas las asociamos a la Edad Media;  es un sentimiento de retroceso,  nos repetimos, andamos en círculos, o en elipsis, y nos volvemos a engañar con otras motivaciones para guerrear.

No tengo  moral para criticar mucho. A nombre del cristianismo o del Dios cristiano se hicieron las cruzadas contra ese mundo islámico, y entre cristianos  por igual se uso a Dios como bandera,  entre católicos y no católicos; el caso occidental más reciente es el de  Irlanda. Hubo guerras pro Papa vs No Papa católico romano.

Usar a Dios como excusa para matar no debería ser, pero esto no es nuevo, ya ha sucedido en las hogueras, en las mazmorras... Se exiliaron  pueblos, huyeron pueblos huyendo de Dios y buscando a Dios, se fundaron naciones a nombre de Dios.

¿Quien podrá levantar una primera piedra?  Mezclamos religión con problemas regionales, y económicos; mezclamos religión con problemas étnicos, y de tribus. Nada es como parece. Todo es más profundo.

Los nuevos aliados bombardean las instalaciones de petróleo, ¿por qué será?

Cuando he visto lo relacionado a las profecías de  Nostrdamus, en sus visiones,  él hababa de un  ejercito con turbantes azules que invadían y acababan con todo, ahora cuando veo a las fuerzas de la ONU me luce ver turbantes azules en lugar de cascos o boinas  ¿Seria eso lo que él vio?

Hubo un momento de nuestras vidas que entendíamos que nuestra lucha era contra un régimen no creyente, ateo, era a favor de la religión que hacíamos lo que hacíamos, “Viva Cristo Rey” gritábamos; y si otros hacen algo parecido,  qué moral tengo para criticar lo que ellos hacen, solo espero que lo hagan de buena fe como lo hizo uno y no sea un matar por matar, o “muere impío” por un “quítame esta paja” .

Bueno todo es confuso, nada está claro, excepto que vamos hacia otra guerra, la  de los seis  días, la del de Golfo, la de Irak, la del Estado Islámico, como quieran llamarle, pero que para allá vamos, para allá vamos. Que Dios nos perdone por haber usado y usar su nombre en vano.

* estrofa del Himno Nacional de Cuba.



jueves, 18 de septiembre de 2014

Dos cristales ante una realidad.


En mi época de estudiante el mundo se dividía en este y oeste. La frontera era Grecia con el Mar Negro, Asia Menor (Turquía) y los Montes Urales. De Estambul* (Bizancio, Constantinopla) a la izquierda o hacia la derecha. Dos mundos de los cuales solo estudiábamos el de la izquierda, occidente. Oriente quedaba en la oscuridad. Rusia por su extensión quedaba en el oriente, pero ella misma era parte de occidente hasta los Urales, mas sin embargo, como también estaba la “cortina de hierro” imaginaria, por alguna razón geopolítica, la URSS quedaba en la oscuridad por igual excepto de que “sabíamos” que su sistema  era antirreligioso, ateo, no democrático, y los hijos eran parte de la responsabilidad del Estado, no de los padres quienes perdían la “Patria Potestad”.

Hoy por hoy, el este sigue siendo misterioso aunque lo estemos descubriendo poco a poco como se pela una cebolla, con lagrimas en los ojos y todo; las lagrimas salen porque debimos haberla conocido desde hace mucho por su riqueza cultural milenaria, por su sabia filosofía de vida, por su amor a la naturaleza, por su vivir en armonía, por tantas cosas, incluyendo sus bellos paisajes de su  naturaleza y  la gastronomía.

Poco a poco descubro desde mi sillón algunos elementos distintos, contrapuestos entre ambos “mundos”. Para el este la realidad aparece como un todo entrelazado, mas para nosotros en el oeste como elementos independientes uno del otro. Eso ya determina nuestra forma de ver el mundo exterior y relacionarnos con ėl. Para nosotros lo que hagamos es independiente, no afecta en nada al vecino, y menos aun al distante. Para ellos todo estȧ concadenado, lo bueno o no tan bueno nos afecta para bien o para mal a todos sin excepción, queramos o no. Formamos un todo único.
                                                                                
De ahí podríamos entender otras diferencias; estamos acostumbrados a que pensemos en nuestro yo, en nuestra individualidad, en nuestro ente aparte,  en nuestra autonomía. En el lado totalmente opuesto están los orientales donde el grupo, el equipo, la comunidad, están por encima de mi individualidad. Lo importante es ser parte de un grupo y sentirse parte del mismo. Todo grupo necesita una autoridad que la guíe, le de cohesión, por tanto para ellos la autoridad es muy importante, necesitan de una figura orientadora en su diario vivir; de ahí la importancia de los mayores en la vida familiar y en  el de la propia comunidad.

Como el sentir del grupo es lo principal en oriente, las contradicciones son aceptadas y son evitadas buscando armonía y consenso. Pero nosotros los de occidente somos hijos de los griegos y los romanos por excelencia donde ellos nos enseñaron a la discusión, a la confrontación de ideas, a la búsqueda constante haciendo preguntas a lo establecido. Luego los alemanes nos enseñan que todo se duda, nada se acepta como bueno y valido sin antes cuestionarlo. La dialéctica nos enseña que el contraponer ideas es la forma de avanzar en nuestro pensamiento, pues de una idea o Tesis se contrapone otra o Antitesis y de estas dos sale una Síntesis que a su vez se convierte en idea principal o Tesis para ser contrapuesta y sigue la cadena.

En el proceso de aprendizaje de la lengua los orientales  parten del verbo, Ej. “correr, caminar, amar, comer”, de la acción; mientras nosotros los occidentales comenzamos con “papȧ, mamȧ, casa” nombres, objetos. Ordenamos nosotros los conocimientos por Categorías y todo lo clasificamos categorizando, en cambio en el este ordenan su todo relacionándolo, al fin y al cabo, la parte para ellos conforma  un gran todo, el todo es su gran campo de  conocimiento. Nuestro aprender es lineal, el de ellos es  circular. Vemos el mundo con otros colores, otras figuras geométricas, otros olores y sabores. A un ritmo distinto.

Veamos lo anterior como generalidades de dos grupos humanos que aun no logran entenderse entre si, no lo veamos bajo ningún concepto como un estereotipo.

Tampoco en lo expresado podemos incluir el mundo africano nativo y el  mundo nacido de la Península Arábiga geográficamente mȧs al  sur del planeta; puede que la parte hoy llamada el “Oriente Medio” tampoco podamos "categorizarla" en lo antes expuesto. Todas son zonas ajenas a nuestros estudios universales de antaño.  Deben haber  zonas contagiadas con las ideas occidentales, pues sufrieron  la colonización de sus pueblos,el uso de  sus territorios al igual que nosotros por estos lares. y por ende, pudieran pensar similar al mundo llamado occidental, pudieran, solo pudieran.

*   Istambul, así lo aprendí, con I.


jueves, 21 de agosto de 2014

El pensar educativo evoluciona.

Somos de una generación donde la enseñaza más que la educación  estaba centrada en el pedagogo. El maestro era el guía y sostenedor del aula, y por tanto hay muchos que añoran los profesores de ese ayer. Esos maestros que sabían, dominaban la asignatura y con su presencia emanaba una especie de sacerdocio. El profesor del aula era el todo, se usaba el sistema de cátedras o “lectures” donde el alumno solo escuchaba, quizás alguna pregunta se permitía. A niveles de los cursos más bajos la regla de madera estaba en la mano para ser usada contra todo aquel que no estuviese centrado en la clase. Muchos zurdos tuvieron que ser derechos, pues la regla impedía el uso de esa mano diabólica, la izquierda.

El estudiante contestaba con la cabeza baja y el ver directamente a los ojos del maestro era considerado  una ofensa, una falta de respeto imperdonable, mas aun contradecir o discutir con el profesor. El estudio memorístico era el aconsejable, letra por letra, coma, punto y coma, signos de interrogación e interjección incluidos. Se repetía el libro el cual era leído, o recitado por el adulto a cargo de la clase quien siempre vestía haciendo ver su diferencia con el resto de los humanos.

Digamos que para los años 60’s entre la muerte de Trujillo, la Revuelta de abril del 65 y la llegada de profesores y religiosos de Cuba al salir de la isla por expulsión o por decisión propia, la educación empezó a centrarse en  nuevas corrientes  que pudiesen considerarse revolucionarias y por las que muchos fueron expulsados del país, o perseguidos o tan solo amonestados como seria en mi caso.

 Paulo Freire brasileiro se hizo famoso con la educación liberadora y el uso del dialogo entre docente y alumno;  los Hermanos de la Salle recién llegados por igual planteaban esta nueva forma de educar. La educación estaría centrada en el alumno, en su medio de vida, en su circunstancia personal. En los años 70’s se empezará a hablar del “Hombre Nuevo” que se ha de formar en las aulas. El Hno. Alfredo Morales publico sus ideas en dos libros durante este  proceso.

Se da por entendido dentro de esta nueva orientación que el alumno ya sabe, tiene conocimientos archivados en su mente, pero puede que  no se haya dado cuenta que sabe porque necesita de un orientador, un consejero, un acompañante en su formación y en su descubrir la realidad que le rodea. Lo importante pasara' a ser  “el aprender a aprender”, aprender a hacer, tener la experiencia;  la memoria deja de tener tanta importancia y el sistema de evaluación por consiguiente varia,  ya no es repetir lo que dice el libro, posiblemente obsoleto, sino ampliar lo que ahí esta', investigar, verlo con tus ojos, tocarlo con tus manos, la práctica es más importante que la teoría. Surgen los talleres de aprendizaje, se comienza a educar sobre valores de honestidad, solidaridad, criticidad, creatividad, responsabilidad hacia una autonomía personal.

Hubo un proceso paralelo durante ese tiempo donde la educación se masifica al crearse  nuevas escuelas y ampliando las que existían en los tres primeros gobiernos del Dr Balaguer;  se comienza a hablar de una Reforma Educativa ya que lo que se tenía en ese momento vigente era la legislación educativa  de 1952 cuando el Dr. Balaguer había sido Secretario de Educación durante el gobierno trujillista. Muchos liceos públicos pasan al Plan de  la Reforma y según sea el área de su ubicación se insistirá  en el aprendizaje de un oficio, ya sea ebanistería, mecánica, soldadura, electricidad, agricultura, plomería, enfermeria. Hay una orientación de graduar bachilleres con un oficio específico que tanto necesitaba y aun  necesita el país. La orientación seguida por los centros privados fue  de una Educación General básicamente orientada como un pre-universitario donde no era necesario el uso de talleres costosos, sino solo  aula, pizarra y tiza; una razón de economía y practicidad.

Solo existían a mí saber el Politécnico Loyola en San Cristóbal  para varones y el de Santiago orientado hacia las damas. Ambos centros creados por Trujillo. Luego vendrían los politécnicos creados por los Salesianos a nivel industrial en las ciudades, el  agrícola de La Vega, y también el agrícola  de los jesuitas en Dajabón.

La legislación en época del gobierno de Leonel Fernández de 1997 y los nuevos curicula desde 1995 están orientada hacia el constructivismo por lo que  sigue estando el enfoque centrado  en el alumno, pero dentro de una teoría educativa especifica, la Constructivista. Se buscaba la criticidad, la creatividad, la solidaridad, un ciudadano capaz de vivir en democracia. El proceso de evaluación estaba basado en proyectos más que en exámenes de preguntas y respuestas. Proyectos donde el alumno solo o en equipo demostrase(n) sus conocimientos nuevos, sus habilidades, destrezas, entendimiento. Este proceso de evaluación puede que a nivel de centros privados lo viésemos, pero en el sector publico  considero que no caló y fuese factible. El profesorado no fue formado para el mismo y para esto se  necesitan  profesores de vocación no de última hora u ocupando un lugar por no conseguir otrotrabajo.

Ahora mismo, en el 2014 con la tanda extendida,  todo el proceso educativo se articula sobre la Educación por Competencias siguiendo las nuevas ideas de la UNESCO y de la Unión Europea.

La UNESCO definió las competencias en la educación como el conjunto de comportamiento socioafectivos, y habilidades cognoscitivas, psicológicas, sensoriales y motoras, que permiten llevar acabo un desempeño, una función, una actividad  una tarea.
  
Mientras el Marco Europeo define competencias como la capacidad demostrada de utilizar conocimientos, destrezas y habilidades personales, sociales y metodológicas, en situaciones de trabajo o estudio y en el desarrollo profesional y personal. Responsabilidad y autonomía.

El sistema de evaluación es según cada estudiante haya adquirido y desarrollado las competencias, ya evaluar al alumno  mediante un examen es obsoleto. El profesor es un acompañante en el proceso de aprendizaje y crecimiento del aprendiz. Aprendiz es otro termino el cual debemos familiarizarnos versus los términos medio caducos de alumno y  estudiante.

Lo importante ya no es el profesor, ya no es el alumno, sino lo logrado, educación centrada en las competencias. En el ámbito administrativo estaríamos hablando de “resultados”.

Es bueno que nos percatemos  que la educación mundial también evoluciona nada es estático, con otros ingredientes; 1- la globalización donde nos hablan del NETIZEN,  (Global Learning and Global Literacy)
2- el mundo digital (Digital Literacy) .

Estos dos elementos  no podemos dejar de lado, son parte de nuestro hoy en marcha.

Resumimos:   a- educación centrada en el maestro hasta 1966, más o menos.
                     b- educación centrada en el alumno que es el que predominaba hasta junio 2014
                     c- educación centrada en competencias  que es la nueva orientación del
                           nuevo curriculum siguiendo las directrices de la UNESCO, agosto 2014.            


domingo, 17 de agosto de 2014

El adios.

Cuando nos enfrentamos al tema de  la muerte o a la muerte en si, hay sentimientos encontrados  sobre  ese momento inevitable del decir adiós.

El sentimiento de que no queremos que se vaya la persona envuelta, versus la visión de aspecto más espiritual o religioso donde se estima  que es mejor que la persona se vaya, y se piensa que dejarlo ir es lo mejor para que no sufre de más.

Los jóvenes no suelen hablar de la muerte, es un evento que lo ven muy lejos; los mayores en experiencia quizás si lo hacen, pero hay otros que le temen hasta al tema, lo evitan, lo evaden, le huyen, no desean enfrentarse a una realidad que vendrá.

La muerte es el dejar de existir como ser vivo que eras y tu cuerpo ha de  empezar un proceso de descomposición de ѐl mismo hasta convertirse en nada, cenizas, huesos sin más.

Cuando el corazón,  deja de latir no significa que haya muerte, pues puede que con masajes, con energía inducida vuelva a palpitar y bombear la sangre necesaria que el cuerpo requiere para mantenerse en estado al menos latente.

El cerebro es quien domina realmente todo y cuando deja de actuar ahí si hay muerte total, pues aun no  podemos tocar, manosear, trasmitir energía a la masa gris;  quizás algún día se logre y mantenerlo vivo como vemos en algunas películas donde el cerebro está fuera de un cuerpo y sigue trasmitiendo mensajes y órdenes por canales  eléctricos de comunicación, pero hoy por hoy, cerebro paralizado es muerte eminente. Cerebro con envío de comunicación eléctrica sigue siendo un cerebro con vida aunque el cuerpo no reaccione a sus órdenes por algún canal obstruido de energía.

Si la masa gris deja de funcionar, si el oxigeno dejó de circular por la falta de  irrigación de la sangre por su masa gris, nada podemos hacer y se pasa a la muerte. Al dar este paso queda quieta, inmóvil toda tu envoltura sobre la cama, la mesa o sobre donde esté el cuerpo  físico en ese instante. Si esto ocurre, aunque el corazón bombee, lo hace artificialmente, porque su control de mando ya no existe actuando, pasó a descansar; algún “aparato” está alterando el proceso inadecuadamente..

Mi YO ya no está dentro de ese cuerpo, mi yo trasciende si tu creencia es espiritual, no importa la religión que sea, o simplemente tu YO desaparece conjuntamente con el ultimo movimiento de tu mente o cerebro, tu ultimo hálito de respiración y tu último sonido coronario.

En el caso mío, por formación, soy de los que opino que mi YO como tal trasciende y deja de estar en el cuerpo. Pasa a otra dimensión o categoría psíquica, espiritual o como deseen nombrar.

La muerte es normal en todo ser vivo, es parte de la vida, es terminar tu misión, la razón de estar aquí. Recuerden que dije que yo opto por una vision espiritual del ser, no por una agnóstica, ni materialista.

Cuando el YO se va, no hay nada tuyo ya ahí, todos tus recuerdos, tu pasado, tu sentimiento, tu pensamiento, tu ayer se fue contigo, ahí solo queda tu exterior, frío, inmóvil, sin vida.

¿Por quѐ aferrarse al ser que ya está por irse?  Quizás quiera irse, porque si quisiera quedarse lucharía y mandaría señales,  signos de algún tipo  querer quedarse, pero no, ya claudicó, ya encontró algo mejor, ya decidió no seguir con esta carga impuesta desde el nacer. Más de una vez he visto que personas que llegan “muertas” al hospital son revividas para luego tener un ser vegetal debido a un derrame cerebral; yo no soy mѐdico, pero eso es lo que vivido en personas cercanas.

Los que quedamos nos aferramos a un cuerpo porque es lo que se ve y se toca, lo real no es visible a  nuestros ojos y como no podemos captarlo,  no podemos aferrarnos a ese  ente invisible, normalmente ni nos percatamos de la existencia de ese ente conocido antes y ahora  en otra forma de existencia.

La naturaleza es sabia,  es mejor dejarla seguir su curso, aunque sea contra viento y marea de nuestro deseo ¿Quѐ hacemos con aferrarnos a un cuerpo sufriendo y un yo sin poder expresarse?  No  hablo o pienso en la eutanasia, eso es otra cosa, solo hablo de dejar a la naturaleza seguir su curso y si es quedar en coma, pues así será, pero si es dejar de estar, así será también, debe ser. Por quѐ mantener un estado somático artificialmente, dejemos que el mismo cuerpo decida y si permanece en coma, pues dejemos que siga existiendo sin elemento artificial secundario.

Personalmente no le temo a la muerte, pero sі al quedar discapacitado, dependiente de otros, y en un proceso de la familia gastar todo lo que posee por uno,  y al final, nada, la muerte. No, no hace falta que otros se sacrifiquen de esa forma. No le veo el sentido de alargar lo inevitable, como tampoco forzar lo que ha de venir.

Cuando llegue el día, tarde o temprano, solo espero estar en mis cabales, ser productivo de alguna forma aunque sea dando amor o cariño a mi alrededor, y no solo demandando y demandando y solo demandando; siendo una carga económica y emocional.

Puede lucir cruel lo anterior, pero prefiero que si me voy a ir me dejen ir, no me detengan, mas aun porque tengo la certeza interna que me encontrarѐ con gente querida, seré parte de mi tribu espiritual inicial de este todo. Yo no voy a menos, voy a más.  No he hablado de resurrección ni nada parecido, solo he dicho regresar a mi tribu inicial, de donde salí antes de encarnar en esta pequeña cárcel. Sentirme libre, sin atadura externa alguna.

Si fuese de los que creo en que más nada hay después de este eterno caminar, dejaría de luchar, progresar, existir, pues nada me seria importante  entonces.

Cuando alguien escribe “Gracias señor por la vida y un día más”, yo pienso en mis adentros, gracias Señor por dejarme vivir un día más en paz y armonía, en salud, de lo contrario, no dejes ni un segundo que así sea; porque creo en ti aun estoy aquí, de lo contrario, ¿para quѐ seguir? Si algún día dejase de creer que existes, no haría absolutamente nada más por continuar arando en este desierto, y en este caminar sin caminos, solo estelas en la mar.


Nota: la muerte de Robin Williams me trajo al tapete este tema nuevamente, y aun recuerdo “What dreams may come”,  su película sobre su esposa Chris  ida al infierno de Dante por haberse suicidado tras una fuerte depresión y R.W.  bajar ѐl al averno a rescatarla; el amor pudo más que la muerte en si. Si fuese eso posible ya tendríamos a Robin Williams con nosotros de nuevo dado la manifestación de sorpresa y de amor que se ha sentido en estos días, pero ¿quien somos para ir contra los deseos de un ser humano que nos hizo reír, sonreír  y llorar?

Otro elemento que reboso mi vaso es la ida a destiempo, segun mi opinion,  de Oscar Lopez Camacho, grupo 77 de La Salle con quien compartimos alegremente hace una semana  en casa de mi cuñada Farah  en Gurabo, Santiago. Como Farah me expresase, “la vida es un Flash”, o más bien en un flash ya no hay más que hacer o decir y debemos ineludiblemente  decir adiós.

viernes, 8 de agosto de 2014

Guardando*

Inaudito.  Me cuestioné, me he cuestionado, ¿seré parte del grupo que tiene “acumulación compulsiva” como enfermedad? Guardamos y guardamos sin estar enfermos psicológicamente o mentalmente de esa “acumulación compulsiva”, pero el caso es que guardamos y volvemos a guardar y sin querer seguimos guardando.

Nunca en mi vida me había movido tanto  de un sitio a otro en tan poco tiempo y tan diversamente cual gitano errático, aunque con mi brújula bien puesta y a la vista, pero moviéndome;  siempre pasa lo mismo, por qué he guardado este papelito, esta factura del super, factura del móvil, factura de la farmacia, en fin…; menos mal que ya los números de los  teléfonos y las direcciones van al celular, si no tendría tarjetitas, y agenditas, y papelitos dentro de la agendita para no sé qué, marcar algo que quizás  no recuerdo que era lo que había que marcar, pero ahí estaría, pero ya no, ahora está en la agenda del celular, está ahí todo y hasta me avisa para que no me olvide además, no tengo que revisar, puede que se me olvide apagarla y siga sonando y sonando.

Pienso que quien programó esto de los E-mails y demás sabían que el Alzheimer existe porque a cada rato me dice: ¿y no va a incluir a fulano o fulana?  ¿Quiso usted decir tal más cual en lugar de cual más tal, la verdad es que a veces hasta me molesta que me estén dando ordenes indirectas, “se te olvido Fulanita” y ahí que no pongo a Fulanita porque este tema no es de su interés, nada de la isla le importa,  y al rato, ahí esta Fulanita añadida, pero Diiioooos, y   a borrar a la tal Fulanita. Quien dice Fulanita también dice Fulanito, aclarandum para los mal pensados o bien pensados y... nada, eso.

Ya me puse a divagar, se han dado cuenta que últimamente estoy divagando, lo cual no significa que esté vagando por ahí aunque sea medio caminante, el caso es que pienso una cosa y eso se encadena en otra y pasa lo que pasó. La mente va más rápido que yo como un todo.

¿Por qué si sabemos que nos vamos de este panorama terrenal sin nada, no podemos botar esa foto, esa medallita? y ¿cuando fue la ultima vez que me puse esa camisa?  Es manga larga y ya no estoy en aulas, luego, hace mucho  ¿qué hago? ¿La guardo por si algún día o le doy espacio al closet? Ya los closets los hacen más pequeños, de menos espacio, ¿cómo se harán algunas damas con la falta de espacio? Puede que el esposo vea su espacio invadido, total,  los hombres  tienen un traje y cambian la corbata y la corbata no ocupa espacio y la camisa es siempre del mismo color, así que nadie sabe si es la de ayer o nueva de lavada.

¡Que trabajo cuesta botar!  No hace mucho bote un cepillo de dientes y una pasta de dientes especifica, ya medio dura, pero no podía, bueno, me tomó cuatro años hacerlo, ¡que cosas, eh!

El caso es que me movía con mi mochila y de pronto ya llevo una maletita y mi mochila de siempre, ¿por qué más?

las gavetas estaban vacías, cuando uno se muda vacía todo, cuando vuelve y se muda, vacía todo, y cuando…y ¿de dónde aparecen tantas cositas y cosotas?

Pero el mal no es mío solo, no señor, acaso no han visto ustedes las películas de USA donde el ático está lleno de cosas y cosas y solo hay polvo, y telarañas y los espíritus también se quedan por ahí, habitando para luego salir y asustar a la artista y a los que vemos la película. O en el Basement, eso,  que además de los ratones o las miles de cucarachitas si se trata de Nueva York,  ahí esta todo lo que se debió botar y uno no pudo botar. Ahora el colmo es que además del ático y el “Basement” alquilan”storage” y la gente se muere y nadie sabia del famoso “storage” y  se encuentran tesoros de antigüedades, que subastan por la tele y papeles y papeles; cuántos árboles hubiésemos salvado si lo hubiéramos reciclado, pero no, los guardamos, es el gusto de tenerlos;  si fueran libros lo entendería más.

A veces sueño que las hadas madrinas me guardan las cosas, y eso de que no soy de los que pone todo amontonado en una esquina, una cosa  arriba de otra para que no se vea alante, no,  a mi me gusta ver lo poco que hay y no perder tiempo buscando, pero la hada me pone cositas; le encanta ponerme  píldoras que no sé de que qué son, ya no tienen papelito, termino botándolas porque no debo equivocarme, pero y ¿de dónde salieron esas píldoras?, ¿habrá un ratoncito del diente,  un conejo de los huevitos de “easter”-pascua también poniendo esas cosas sobre la mesa, en la gaveta de abajo?,   la de abajo, esa,  la que se abre menos. ¡Que trabajo nos cuesta despegarnos de tonterías, porque en el fondo todo eso son tonterías, sin valor y sin importancia!

No crean que es cosas de gente mayor, entrados en edad, no, hasta los más jóvenes les pasa lo mismo, revísense, abran su gaveta, vacíenla sobre la cama y digan sinceramente de todo eso que esta ahí qué realmente debe quedarse en la gaveta y qué en el zafacón, háganlo, claro, no se atreven, bueno, otro día será, como decía Juan Bó, “hasta mañana si Dios quiere, dominicanos”; en  mi caso, hasta la semana que viene, si Dios deja que así sea.

Al poner el titulo me acordé de mi mamá que siempre me decía cuando yo no hacia algo que ella me pedía, “guarda pan para mayo y maloja para tu caballo”.



viernes, 1 de agosto de 2014

...del mundo

Hace poco escribí en “la esquina del olvido de dj” un escrito que titule “Tuti Fruti”* donde hacia ver la multiplicidad de mis orígenes y de  mi pasar por tierras donde algo quedó impregnado dentro de mi y donde no solo entendí su cultura sino la comprendí, la hice mía; y ahora  la ando regando por donde quiera que voy, me expreso y lanzo mis conceptos e ideas. Hay veces que los otros no saben determinar mi procedencia original ya que no cumplo con el estereotipo del nacido en la isla, aunque a veces se me sale, como lo del “negro detrás de la oreja”.

Yo he llegado a la conclusión de que si existe un “fatum” o un destino, una previsión ya escrita de mi quehacer en el mundo es ser ciudadano del planeta. ¿En qué me baso para esta afirmación?, Veamos:

1-      El nacer en la isla, tener  una madre yucateca,  tener que salir hacia el norte asoleado de la Florida, venir a Dominicana, pasar por Venezuela, regresar a Dominicana y echar raíces en ella sin dejar de interesarme lo que sucede fuera de nuestra escasa frontera de agua, ya sea “frontera” de agua dulce o de agua  salada.

2-      Entrar en la sociedad de Jesús donde no hay una patria, sino que el mundo entero es tu patria. 

3-      Salido de la sociedad jesuítica, me inscribo en Planetary Citizenship con pasaporte no oficial, azulito pálido y todo,  del grupo afiliado a la ONU.

4-      Darle importancia  a todo lo referente a las Naciones Unidas y su Declaración de Derechos Humanos e incluso la bandera inicial de Senderos tenia el tono de azul de la ONU, los primeros graduandos lo hicieron  con una tola al estilo INTEC, pero de ese color azul pálido, sin toga,  luego fue cambiado por los  colores de la bandera dominicana y se impuso la toga. ¿Razón del cambio? El logos de los uniformes hubo que detallarlo más para hacerlo más visible y entonces todo se unificó. 

5-      Insistir en la educación de los adolescentes de la importancia de conocer el Planeta como un todo sin perder sus raíces “nacionales o regionales”.

6-      El representar en distintos momentos a instituciones educativas que promueven el conocimiento de otro idioma y ser parte de otra cultura diferente a la nuestra buscando un ciudadano del mundo. 

7-      Ser parte de una manera u otra con la comunidad circundante de Heritage School en Cap Cana donde confluyen varias nacionalidades y conviven todas ellas admirablemente.

8-      Formar parte en estos últimos meses como voluntario de AFS INTERCULTURA donde la institución promueve la visión  y educación de un ciudadano del mundo pudiendo así entender, comprender y tener  las habilidades necesarias para vivir en paz y en armonía entre personas de distintas culturas. 

9-      Tener una clara visión de que no somos ni de aquí ni de allá, con todo lo que esto atañe y duele siendo expuesto en más de un articulo del blog por “el porvenir del pasado”.

10-   Por ultimo, llegar a la plena conciencia de que el ultimo reducto de cubanidad que queda en mi familia muere el día que yo deje de estar físicamente. Todos o son dominicanos o son de USA, ninguno “es” de la isla.

Todo me indica que estaba escrito desde los inicios o desde antes de mí existir que seria Ciudadano del mundo y así se ha ido haciendo en este andar haciendo caminos en la mar.   

*  http://enlaesquinadelolvidodedj.blogspot.com/2013/12/una-especie-de-tuti-fruti.html






jueves, 24 de julio de 2014

Desorientado

Ser mensajero de la palabra es una gran responsabilidad sobre todo que debe ser acorde a la palabra misma y no a los caprichos de tu mente que escriba lo que tu quieres y no lo que debes escribir como mensaje,  ¿cómo saber si no te estas engañando a ti mismo en este proceso de ser mensajero de la palabra?

¿Cómo saber si lo dicho es lo correcto?  ¿Solo dejándote llevar por la palabra que has escrito u otro escribió como mensajero, como interlocutor o intermediario entre el mensaje que escribes, sin escuchar realmente a la fuente del mensaje mismo,  y el papel o pantalla?

Si el amar es soportarlo todo, esperarlo todo y Pablo nos habla del amor humano, a la humanidad en si, ¿por qué es tan difícil el darnos cuenta de que casi todos tratan de aprovecharse de nuestras debilidades, de nuestra bondad?

Se nos dice que seamos de una forma y la vida diaria nos enseña que debemos ser todo lo opuesto. La palabra debe tener la verdad, y entonces, ¿qué hacemos?

Debo ver a los demás como imagen y semejanza de la divinidad, pero debo ver en ellos a su vez a seres que son egoístas que solo piensan en ellos mismos y cómo montarse en nosotros, usarnos ¿Cómo lo hago?

Ser sinceros y decir la verdad, y la decimos y como quiera los que nos rodean piensan, juzgan que no es así, que estamos mintiendo porque todos mienten, entonces  yo me callo, pues evito el mentir porque se me enseñó que el mentir era uno de los 10 que debo cumplir. Entonces, ¿cómo hago?

Uno piensa que ha hecho lo correcto y justo y de pronto he sido blando, inocente, ingenuo, he actuado como si viviese en otro mundo, procedente de otro planeta, ¿y entonces?

¿Cómo ser mensajero de la palabra si yo mismo no sé, si yo mismo descubro en el diario vivir que el amor se ha convertido en una palabra vacía donde el egoísmo es el que reina?

¿Cómo seguir caminando contra la corriente, con el viento en contra?

Quisiera, desearía ser un mensajero, pero de la verdad real, no de una verdad ficticia. A veces los faros están apagados o hay tanta neblina que son imperceptibles y uno se siente desorientado o, ¿es que estoy desorientado realmente?

Nada, no hagan mucho caso, hay días en que hay más preguntas que respuestas y éste es uno de esos.






jueves, 17 de julio de 2014

El pequeño burgués.

Hace unos años, era un insulto para mí que me dijesen niño bitongo, gusano, o burgués. Hasta hace no muy poco tiempo,  como ya no era niño y  descubrí que no era bitongo ni nunca lo fui, sino que me la buscaba como hijo fiel de mi isla, no me hería esa connotación, me resbalaba.

 Lo de gusano dejaron de usarlo cuando se dieron cuenta que esos gusanos eran las mariposas que podrían mojarlos con sus euros o dólares y por tanto dejó de ser usado como insulto. Pero eso de burgués quedó dándome puntillazos.

Cortez cuando canta su canción del “pequeño burgués” menciona que había que saber su poco de inglés y lucir superdotado y yo me decía, aunque no lo parezca aprendí primero inglés y luego castellano, por tanto  sé inglés desde peque  y no es que me la luzco, pero bruto no soy, luego eso es para el que luce y no es, no es para mi.

Añadía que había que aparentar ser liberal y de tendencia izquierdosa, y yo repostaba, es que yo soy de mentalidad centro izquierda, siempre lo he sido, dependiendo la sociedad donde he estado, de lo contrario nunca hubiese tenido problemas con los que deciden lo si y lo no, pero los tuve. Reitero siempre he sido de mentalidad abierta, liberal. No es que esté aprendiendo a fingir es que soy así, mi padre me educó así. Y también es verdad que a los 15 años de edad yo tenia una joven que era mi secretaria en el DRE, y es verdad que en la era de UNIBE yo tenia chofer, y este cargo se mantuvo como gasto de la familia sin ya yo ser parte de  UNIBE mientras se pudo económicamente hablando.

Y Cortez finalizaba diciendo que había que tener vocación, ambición  y paciencia. Y ya ahí me convencí, no tengo ninguna de esas tres cualidades, ni ambición, solo hacer lo que debo hacer y me gusta  hacer; vocación de figurear y aparentar, nunca; y paciencia, eso es lo que menos tengo, paciencia. Luego, no, a mirar para otro lado.

Hace unos días, solo hace unos días, un poco tarde diría, descubrí leyendo a Thomas Mann en la Montaña Mágica que mi amigo Ricardin me aconsejó que lo leyese o releyese, ya que con el tiempo y la edad otras verdades afloran,  descubrí que yo era un humanista burgués o un burgués humanista. Eso de humanista* está claro como el agua destilada, pongo al hombre como centro de toda actividad y siempre he tratado de trabajar, luchar por la paz, la justicia la igualdad, la fraternidad, la libertad y felicidad de cuanto hombre o mujer exista en la faz del planeta y además soy educador. Eso de humanista ya lo sabia, ¡pero burgués!, yo burgués, suena aun tan feo en mis oídos esa frase.

Es verdad que soy citadino, aunque descubro en estas ultimas semanas la dulzura de la paz de la no ciudad, el encanto de poder confiar en los vecinos y sentirte parte de una comunidad las 24/7, poder caminar y andar por ahí sin preocupación, pero, ¿ yo burgués?

Volví a Cortez y no, pero si. Hay un ver la vida, hay un actuar en la vida de forma romántica, idealista, confiada que es burguesa. Hay detalles de buen comer, buen vivir, buen vestir según pudiese alcanzar el bolsillo y es burguesa.

Mi padre siempre que podía me contaba del señor que salía los domingos con su familia a tomar el fresco y caminar por la ciudad, almidonado, limpio, planchado, distinguido aunque se le viesen las manchas y marcas del oxido en su ropa. Ser pobre no conlleva ser descuidado o sucio. La presencia es válida, tiene un valor en si y esa es una vision burguesa.

En verdad le doy mucha importancia a la primera impresión que una persona me da por su fachada, luego uno puede cambiar o empeorar esa vision, pero la primera impresión fue importante y quizás aun es importante.

Hubo  una época donde había que lucir menos que los menos. Recuerdo al Padre Federico Arvesu sj al verme un hoyo en la suela de uno de mis zapatos llamarme y decirme, nosotros hacemos votos de pobreza no de miseria, son dos cosas distintas y  que no va con nosotros. Si deseamos que nos abran las puertas y llevar nuestro mensaje; zapatos gastados si, rotos no. Me acuerda de Francisco, el Papa, este hecho.

Esa época ya pasó y pasó por encima de mi, no en mí, por tanto, si nací burgués crecí burgués,  soy burgués;  y he dedicado mi vida a trabajar precisamente con la burguesía tanto en Venezuela como en Santiago como en Santo Domingo y lo mejor de todo es que no me arrepiento, para nada!.

Ahondando un poco más llego a la conclusión de  que nací en la clase media, me desarrollé dentro de ella;  en algunos momentos de mi historia hemos estado con una mano delante y otra atrás, mas sin embargo no hemos dejado de ser de clase media por la educación, formación, instrucción, valores y mentalidad con que nos hemos desenvuelto, podríamos decir que pasamos en esos momentos a ser de la clase media desmejorada, pero de la clase media según haya sido el contexto social que nos ha tocado vivir en esos momentos.

En definitiva soy un burgués humanista o un humanista burgués, ya lo volví a decir;  no dudemos  más de este punto. Como todo, ya no me ofende el término



* “Nosotros, los humanistas, tenemos aficiones pedagógicas. Señores el lazo histórico entre el humanismo y la pedagogía, explica el lazo psicológico que existe entre ambas.  No hay que desposeer a los humanistas de su función de educadores. No se  les puede arrebatar, pues son los únicos depositarios de una tradición; la de la dignidad y belleza humana. En otras épocas los humanistas reemplazaron a los sacerdotes que,...pudieron arrogarse la dirección de la juventud. Desde entonces señores, no ha surgido otra clase de educador.”   dicho por  Settembrini, personaje de  Thomas Mann, La Montaña Mágica.  

jueves, 10 de julio de 2014

La espalda.

Me encanta  ver fotografías del reino animal, de la vegetación, los bosques,  de la flora y su riqueza de colores, los paisajes naturales, el efecto del tiempo sobre la misma naturaleza;   fotos de la naturaleza,  salvaje, virgen, espontánea, propia de nuestra evolución como planeta, como un todo. No es que le de menos valor a la construcción y arquitectura realizada por el  hombre,  pero siempre será producto del hombre y no de la natura como tal.

Si existe alguna foto o video que me place ver es la de los gorilas, orangutanes, chimpancés cuando se reúnen o forman pareja, no necesariamente de sexo distinto, y uno le arrasca la espalda al otro, le saca los piojos, y se los va comiendo. Se turnan. Tu a mi y yo a ti.  Un simple arrascar la espalda y uno ve la cara de placer en ese acto que solo puede ser comunitario, de mas de un miembro, pues uno solo no puede realizarlo, no alcanza a la totalidad de su propia espalda.

Viendo la película de Tarzán como dibujo más que animado, computarizado; volví a identificarme con este acto comunitario, el de la espalda.

He visto que algunos simios solitarios  usan un árbol y se arrascan la espalda contra el mismo ya que  no hay otro ser que le ayude. No se si será similar el hacer uso del filo de la puerta para  rascarse la espalda, o el secarse con la toalla con fuerza y así  sentir el placer de  la espalda siendo  arrascada, puede que sea útil  el uso de un cepillo largo para bañarse la parte que uno no ve de si mismo; desde el cuello hasta donde la espalda pierde su nombre.

Bueno, como ven, a mi me gusta que me arrasquen la espalda, dentro del proceso evolutivo eso quedó en mi memoria genética de parte de mis ancestros peludos. Cuando me levanto en la mañana camino encorvado cual orangután y luego lentamente voy pasando a Homo habilis preparando el café y ya bebido el néctar de los dioses negros, poco a poco me logro erguir  normalmente, casi recto y paso entonces  a ser Homo Sapiens un día más.  Una transición diaria de minutos o segundos recordando nuesro ayer.

Todo esto lo cito a colación de que una compañera  mencionó que a mi no me gustaba que me tocasen físicamente y al decirlo, simultáneamente me estaba tocando con sus uñas mi hombro, que es parte de mi espalda, y sin saberlo  me estaba proporcionando un gran placer, no necesariamente erótico, sino un placer ancestral.

En ese momento espontáneamente dije; “depende del sitio que me toquen y cómo me toquen”, y lógico, todos los ahí reunidos me imagino pensaron en  lo erótico, pues así sonó al salir de mi boca, y hasta rojo me puse, según me fue dicho, pero hay un aviso de placer añejado en algún resquicio del cerebro  al sentirse tocado a lo largo de  la espalda.

Hay escenas eróticas en que plasman a la mujer arañando con fuerza y dejando su firma uñistica sobre el territorio dorsal. Por algo será que es filmado y es disfrutado, o asi parece..
  
Piénsenlo, sean honestos y descubran que en eso también tu, yo, nosotros nos parecemos a los simios. No obstante  el animal que se parece más a nosotros anatómicamente sea el cerdo. Puede que por eso en la Biblia cuando un espíritu maligno sale de un cuerpo este se introduce en un cerdo y quizás es  por esta razón es que  los israelíes o judíos no comen carne de puerco ni sus derivados, son malignos.

Uno no sabe si  nos comemos un espíritu diabolico conjuntamente al degustar la masa de un puerquito bien sazonado y cocinado lentamente en una caja china.  Ya divague.

Yo diría que el éxito de los masajistas está en que le dan a la espalda su ir y venir, con rocas tibias o calientes sobre la columna vertebral o no, con codos o con pura manotas, y su aceite aromático sobre  toda  la espalda. Uno se deja llevar y se extasía con ese proceso dando rienda a un placer del cuerpo sin que nadie pueda decir que sea pecaminoso, si es que eso existe. 


Cuando lei sobre las zonas eróticas o erogenas  del cuerpo no recuerdo que la espalda estuviese incluida, fue hace mucho que uno solia  leer de esas cosas y ya la memoria dobla la esquina, pero sin duda debe estarlo, y si no, anótenla.

viernes, 4 de julio de 2014

Pero no puedo dejar de ser yo.

No puedo dejar de ser quien soy. Parte de lo que soy se debe a la formación o educación que recibí y sigo recibiendo, pues uno no deja de aprender, aquilatar, aprehender  conceptos e ideas, reformularse, pasar por un proceso de reingeniería consigo mismo, adquirir nuevas destrezas y habilidades, enfrentarse con su yo profundo en el silencio para auto comprenderse y  poder así hacer todo lo dicho anteriormente.

A uno lo educan, o a mi en este caso,  con el deseo de saber más, aprender más, no quedarse con lo que ya conoce, hurgar, investigar, puede que sea aquello del “magis de San Ignacio”, pero también sė que buscar lo mejor sin sopesar lo bueno que tienes delante te puede dejar  sin lo bueno y sin lo mejor, “mas vale pájaro en mano que mil volando”, pero luego que ya tienes el pájaro contigo, ¿quė te impide seguir domesticando otras aves?

Hay algo en lo que sigo siendo un inadaptado, dentro de la sociedad dominicana o de cualquier sociedad latina, ya sea italiana, española, cubana, venezolana, argentina, latina. Mi mal es solo uno en este sentido, no sė gritar cuando otro habla, no se abrir la boca con energía cuando otro lo hace, más bien enmudezco, me retraigo cual molusco dentro de su concha, o como un cangrejo que recula y se mete en su cueva.

No me educaron a imponerme, a no ser que estė enojado y pierda el control de mi mismo, ahí Si lo hago, pero como me enseñaron a controlarme, a ser civilizado, pues me muerdo la lengua, bajo la cabeza, retrocedo un paso, me aíslo, paso a un silencio casi absoluto, digo casi, pues puede que  el que estė a mi lado  oiga mis resoplidos.

Hasta el día en que  pusieron los papelitos con números para atender por orden de llegada, fueron muchos las heladerías, farmacias, dulcerías, panaderías a las cuales dejė de visitar, porque me molesta que me quiten mi espacio, se introduzcan en mis fronteras,  me topeten, empujen, metan su axila hedionda en mi nariz, me griten en mi oído, no lo soporto. Mi espacio es mi espacio, y mi turno es mi turno, mi derecho es mi derecho. Si y respeto a los otros, ¿por quė me invaden? Suena a berrinche y lo es, me enculilla.

No obstante, cuando llegaron los papelitos fueron  muchas las veces que tuve que preguntar: ¿Atienden por número o es de adorno? ¿Por qué número van, porque no me he movido de aquí y veo que otros van delante y  recién llegan? No hay cultura de orden y yo debo tener un gen suizo medio extraviado.

En un grupo no se me ocurre hablar  de una esquina a la otra  esquina, mas bien con los cercanos a uno, ya en un círculo la cosa cambia, nadie queda lejos. El hacerme sentir gritando no está en mi, pienso que debo hacerme notar con mi participación, por mis  ideas, por una  exposición tranquila, mesurada, pero nunca por imponerme al derecho y pensamiento de otros.
  
Cuando estuve en INTEC  y era parte del Consejo Académico,  Eduardo Latorrre, Rector entonces,  siempre proponía consenso basado en ideas claras, precisas y que todos las apoyásemos no por imposición sino por convicción, todos votábamos a favor o en contra, nadie podía decir que ėl o ella “no estaba de acuerdo, pero la mayoría se impuso y…”; solo así nos defenderíamos uno al otro mas tarde, luego, en el quehacer diario, con un pensamiento y acción monolíticos. Me quedė con esa visión en mi actuar grupal, institucional.

Siempre he valorado más al dirigente que por detrás traza la ruta a seguir, que al líder que se empotra y  aparece como cabeza andante.

Últimamente me ha sucedido que no he abierto mi boca lo suficiente, o el tono de mi voz no lo es, quizás es que no me ha lucido “polite” el hacerlo y otros toman la delantera y SI lo hacen, gritan, no hablan, gritan,  y esa es mi debilidad. Digamos que me dejo apabullar por la voz más alta y si es del sexo femenino, una mujer, más aun, pues pienso que es indelicado el aullar, rugir sobre la voz de una dama.

¡Que complicado soy!, pero no puedo dejar de ser yo.

Todo lo expresado hasta aquí  porque me he puesto a analizar algunos comportamientos míos últimos en grupo, sus resultados, causas;  suelo revisarme periódicamente, es parte de la educación jesuítica;  y he llegado a esta conclusión: no me educaron para gritar, sino para escuchar, ver, oír, observar, analizar,  anotar y opinar, nunca avasallar, ni imponer mis ideas, sino buscar el consenso aunque eso signifique que no todos mis aportes se den como buenos y válidos. No me justifico, solo trato de entenderme, ya dije antes, no puedo dejar de ser yo; en este caso, variar alteraría mis principios, mi zapata.




sábado, 31 de mayo de 2014

Al pasado "montado en guagua".

En mi archivito personal busco: ¿cómo eran los conductores de  auto en la isla?  Recurrí a mi memoria ante la siguiente pregunta: ¿Conducir allá era como en Dominicana que en línea general la persona tranquila y sumisa se convierte detrás del volante en un “rompe hielo”, ¡quítese del medio, aquí voy yo!?  Yo añadí como comentario personal: en el supermercado por igual, te apabullan si es necesario, te tumban si es necesario, te atropellan si es necesario,  como si las habichuelas se estuviesen quemando en la cocina dejada prendida.

Me quedé en silencio  por un rato. Tuve que pensar  antes de responder y dije “NO SE” porque mi experiencia en La Habana es que no hacía falta tener un  automóvil, el servicio de autobuses era suficientemente bueno, continuo, preciso en el tiempo, puntual,  desalojado, limpio, bien cuidado dentro y por fuera que no había por qué pensar en tener un  auto. Añadí, es como tener un automóvil en Nueva York, la ciudad,  ¿para qué?

Cuando se salía de noche y ya el trasporte público prácticamente era nulo, entonces entraban a funcionar las piqueras o taxis. Muchas personas por mi barrio  tenían auto  para cuando se transportaban  fuera de la ciudad,  a las fincas, casas de playa en Tarara, hacia Varadero, pero dentro de la ciudad, no.

El servicio de transporte a las escuelas era igual de bueno, a domicilio, hasta la puerta. Eran autobuses de la escuela para uso exclusivo  escolar.

Al menos esa es mi experiencia en la intersección de la 41 o Avenida Columbia, ese nombre era porque terminaba  en la Fortaleza Columbia, y  con la  42, la cual  ésta ultima moría  en La Copa de Miramar, hoy “Playa”.  41 y 42 es la  esquina,  en el Reparto Kohly, algunos decían Altos de  Almendares, en Marianao, parte de la ciudad de La Habana, Hoy diríamos, de la Gran Habana.

Por cierto, algo que aprendí hace poco es que el nombre de la ciudad de La Habana tiene el artículo determinado “la” como parte de su nombre. Si buscas algo en la red y pones Habana solamente, no aparece nada, pero si pones LA Habana todo fluye.

En una época hubo “tranvías”, pasaban por la esquina de casa, sobre  sus rieles y tomaban la corriente eléctrica como energía, si mal no recuerdo en 23 con la 12 se intercambiaban, quizás por eso más tarde esa misma intersección era la que se usaba para las transferencias de una guagua a otra. Para los años  57 pienso que ya no había tranvías en la ciudad, menos aun  teniendo como vía principal la 23.   

Cuando en el 64 al finalizar el “high school” fui a la ciudad de Chicago a ver a mis padres, me llamó la atención de verlos nuevamente por ”Oak Park”, ya iban en desuso,  quedando poco a poco solo los trenes elevados, no “subways”,  que iban al “Loop” o “downtown”.

Luego los volví a ver en San Francisco con sus calles empinadas, las cuales aparecen en todas la películas filmadas en la  ciudad, pero los tranvías  que realmente quedan con un grato recuerdo en mis adentros  son los  de la ciudad de “New Orleans”,  transitando  por calles de casas de un ayer muy ayer,  de otra edad;  en medio de ambas vías  una zona verde bien amplia, cuidada, con sus grandes árboles. Me  daba la sensación de  estar paseando por las calles del reparto Kohly,  pero en Luisiana.  Esa es una experiencia del espíritu.

Volviendo a LA Habana, los autobuses eran de dos compañías;  una de una cooperativa (la COA) con sus guaguas verdes y amarillas,  y la otra de una empresa privada (Autobuses Modernos),  y los vehículos  eran blancos, grandes,  con aire acondicionado;  les llamábamos o les decíamos “las enfermeras”, por su color blanco impecable, marca Leyland.

Por cierto, nosotros le decimos guagua a los autobuses porque la compañía estadounidense que las vendía en la isla para aquel entonces,   era la “Wa and Wa Co. Inc.” (Washington, Walton and Company Incorporated), = Wa Wa = gua gua.

En las guaguas de la cooperativa quizás te podía tocar ir de pie, en las enfermeras no, solo tomaban los pasajeros que pudiesen sentarse. Uno entraba por la puerta delantera y salía siempre por rasera, una persona recibía el dinero, pero aquí  me confundo si era como en Miami que el chofer cobraba, o había alguien que lo hacia e incluso te ponchaba el papel de las transferencias.

Un cordón-alambre  por encima de las ventanas servían al  accionarlo para avisar tu intención de bajarte en la próxima parada fija y el autobús se detenía en ella, normalmente las paradas eran al final de la calle, frente al semáforo.

Tenían horas, y  minutos fijos para cada autobús cruzar por un sitio;  eran revisados periódicamente por un inspector que  firmaba y sellaba una planilla al chofer con el reloj automático llevado en la cintura. El inspector usaba una de las paradas fijas para estos fines, nunca la misma.

Las rutas de la cooperativa eran con números, recuerdo la 28 y la 22 como las más usadas por nosotros, pero las blancas eran con letra y numero, la L1 y la L2 son las que vienen al frente de mi recuerdo.

Los sábados al salir con mi padre, pues tomábamos el ómnibus y si era necesario, hacíamos cambios en la 12 y 23 para luego ir a otra zona de la ciudad. Cerca,  en 23 y 10 estaba el “Ten Cent”.  Entiendo que la 23 y 12 en el Vedado,  era un gran cuatro esquinas con flores hacia el cementerio cercano,  cafeterías con ricos  sándwiches cubanos y media noche. Los pastelitos o turcos como se dice por acá, eran en la calle Obispo, no se por que pensé ahora en los pastelitos de cangrejo o  de guayaba, debo tener deseos de comerlos que surgen tan por su cuenta.

No, no teníamos obligación de  tener vehiculo antes de los inicios de los 60’s para trasladarnos al trabajo, al cine o de compras. Aunque siempre teníamos la piquera de Manuel para cualquier eventualidad o emergencia. Ya luego no sé, Salí, me fui o me fueron.

La avenida 41 nos llevaba hasta la Ciudad Militar o Fortaleza Columbia, donde ya en la revolución se realizó una jornada patriótica a la cual asistí y el sol hizo de mi lo que quiso; nos llevaba hacia el Instituto de Marianao,  donde me examiné de 8vo para ingresar al bachillerato; hacia el cine donde iba con Nino y mi hermana, yo de chaperón;  hacia Tropicana donde solo pude ir  30 años después por razones de edad, hacia el Colegio de Belén, donde iba a las actividades festivas y a dar clases  en la noche  a los obreros; hacia el Studium de la Tropical donde iba a hacer campo y pista, pues auque no lo crean, en aquel tiempo yo y mi delgadez éramos  muy buenos corriendo en campo corto, aunque  nunca pude hacer saltar y correr, solo correr. A grandes distancias no era tan bueno. La  41 nos llevaba  hacia el río Almendares y su puente, así como  a la estación de policía el cual  fue demolido  en los inicios del triunfo de la revolución para convertirlo  en un parque  de recreo olvidando la época de torturas, y justo ahí se convertía en la 23 hasta llegar a La Rampa, la CMQ,  y al Malecón.

No, no hacia falta vehiculo. Al menos en mi familia nos manejamos sin su necesidad, de hecho mi padre tuvo auto y decidió quedarse sin él, ¿para qué? Yo diría que los de la ciudad manejaban bien, al paso, respetando las luces y las leyes de tránsito, al menos lo que yo he podido recordar es eso, o solo a Manuel el de la piquera conduciendo.  No sé, ya hay cosas que se diluyen, están doblando la esquina del olvido, hacia el olvido.


Nota: Agradezco a Adam, a Lucie y a Pat por hacerme volver al pasado “montado en guagua”.